La trágica caída del sábado en el velódromo «Ernesto Contreras» en Mendoza que terminó provocando la muerte del ciclista Nicolás Naranjo, que será sepultado hoy, sigue dejando tela para cortar. Mientras desde la Asociación Ciclista Mendocina le afirmaron a este medio que las cuestiones de seguridad estaban dadas para que la competencia se desarrollara en forma normal, un testigo presencial de la tragedia dio su versión y apuntó a maniobras peligrosas dentro del pelotón.
Es que el sábado, en el momento que se desarrollaba la prueba de Eliminación, Juan Gutiérrez y los sanjuaninos Kevin Castro, Santiago Sánchez y Naranjo se fueron al suelo, pero el velocista de «Chimbas Te Quiero» se llevó la peor parte. ¿Qué falló? Según Fernando Lanzone, presidente de la Asociación Ciclista Mendocina, fue un accidente que, lógicamente, nadie hubiese imaginado. El mandamás del ciclismo mendocino dijo que las cuestiones de seguridad eran las correctas, que había en el velódromo las dos ambulancias que se exige por reglamento y que si no hubiese sido por la inmediata atención, el desenlace podría haber sido peor en la pista mendocina. «Es una tristeza gigante la que sentimos porque nunca, en los años que llevo como dirigente de ciclismo, me pasó vivir una cosa tan fea. Creo que el destino juega su papel y a Nico le pasó eso», expresó dolido Lanzone. «La seguridad estaba dada para la competencia, como todos los fines de semana que tenemos carreras en la pista. La atención médica actuó de inmediato porque Nico tuvo tres paros cardíacos, uno en la ambulancia cuando lo trasladaban al Hospital Lagomaggiore y los otros dos ya estando en el hospital. La atención para él estuvo ahí, en el momento», afirmó el dirigente.
La jornada se presentó accidentada ese sábado en el velódromo mendocino, primero Rodrigo Díaz y Matías Contreras habían ido al piso sobre la recta opuesta y mientras esos ciclistas recibían atención médica, la prueba se reanudó y tres vueltas después fue donde se produjo la caída que tuvo consecuencias fatales con la muerte de Naranjo. Además del ciclista de La Bebida, se vieron involucrados el mendocino Gutiérrez y los sanjuaninos Castro y Sánchez. Ayer, Santiago Sánchez dio su versión, el ciclista que también se preparaba para el Argentino de Pista que se desarrollará en ese mismo escenario, dijo que todavía no logra salir del trauma por todo lo que vivió y argumentó que antes hubo algunas maniobras peligrosas dentro del pelotón. «Venía por abajo, adelante y de repente se me apareció la bici de Nico, pero Nico ya estaba caído. Yo traté de esquivar y me tiré al pasto, si bien estaba consciente no podía ponerme de pie. La pista se llenó de gente y cuando miré, vi a Nico convulsionando y sentía que respiraba raro, como muy fuerte», expresó el ciclista de la Municipalidad de Rawson.
Lanzone afirmó que Naranjo tuvo tres paros cardiorrespiratorios.
Sánchez, manifestó que el pelotón venía «nervioso», con algunos ciclistas insistentes por ganar, y dijo que el cuerpo de comisarios podría haber sido más severo para calmar las aguas. «Habían algunos movimientos dentro del pelotón en donde los comisarios podrían haber hecho un llamado de atención. Acá en San Juan cuando hay un «cuerpazo» o una «encerrada», te llaman la atención primero y si seguís, te bajan de carrera pero en Mendoza no pasó», manifestó. Lanzone, por su parte, dio su versión sobre lo que dijo Sánchez y negó que eso haya sucedido: «El comisariato no es permisivo para nada. Cuando se produce alguna infracción inmediatamente se comunica por el altavoz. Quizás pasa como en el fútbol cuando por ahí se deja pasar alguna amarilla. Estamos todos dolidos por lo que pasó, pero fue una caída que jamás hubiésemos imaginado las consecuencias», expresó. Lo cierto es que la caída terminó provocándole muerte cerebral a Naranjo, que 24 horas después tuvo el peor y más triste desenlace.
Fuente: Diario de Cuyo.