Tiene 59 años y actualmente dirige las divisiones inferiores de Juventud Ullunera. Trabaja diariamente con chicos de 11 a 17 años, con quienes comparte la pasión por el fútbol. Rubén Soria tiene muchas ganas de enseñar y sus pibes, de aprender. No sólo en lo estrictamente deportiva, sino también en el lado humano.
Rubén Soria lucha desde hace un tiempo contra un cáncer de próstata. Sin embargo, pese al sufrimiento, quiere que sus conocimientos se expandan. «Por un mal tratamiento se me hizo una metástasis. Gracias a Dios, por ahora lo voy llevando. Se me hizo una cicatrización hacia adentro y estuve dos años con sonda directa. Me operaron pero al estar tanto tiemppo con sonda, la vejiga se acostumbró y ahora no la puedo dejar», contó en diálogo con La Excusa Deportiva.
Según indicó, según el último estudio, el cáncer disminuyó un 70 por ciento. «Ahora voy por el 30 restante», dijo con la seguridad que le da su familia, su amor por el fútbol, sus ganas de seguir. «Me va a quedar lo de la sonda, porque me sangra y es lo que más me hace sufrir mucho. Pero continúo porque me encanta el fútbol y educar a los niños. Me duele pero sigo adelante por los chicos», añadió.
Exjugador de Del Bono y San Martín, también tuvo un paso por Excursionista. También se dio el gusto de hacer atletismo.
«Yo tenía una experiencia como entrenador en Defensores de Andacollo. A los dirigentes de Juventud Ullunera les gustó mi trabajo y me convocaron. Estuve en Cuarta y este año me hice cargo de las inferiores», manifestó.
Soria se identifica con Timoteo Griguol. «De los técnicos actuales no me convence ninguno», aseguró. ¿Qué tienen en común con el ex Ferro y Gimnasia?: la importancia de la educación en la vida de los pibes. «Es lo primero que les inculco. Cuando andan mal en el colegio y no respetan a los padres también les hago ver que eso no debe pasar. La familia y el estudio están primero».
«Soy un DT que trata de inculcarles jugar un fútbol vistoso, que sean vertiginosos. Que cuando comenten una falta, pidan disculpas, me considero exigente en esa parte. Sueño cque esta enfermedad se cure, terminar con el sufrimiento. Tambien hacer el curso de director técnico y poder dirigir a un equipo de primera división», concluyó.
