El 2022 será seguramente un año inolvidable para Thomas Castañeda Maldonado, ya que los resultados obtenidos a lo largo de los primeros ocho meses le dieron un gran número de alegrías, por la importancia de las pruebas ganadas, de títulos obtenidos.
En enero se adjudicó el Triatlón Internacional de La Paz, Entre Ríos, una de las competencias internacionales de más tradición en el país. En abril fue campeón argentino de triatlón, en la gran final disputada en Mendoza y 48 horas después estaba viajando rumbo a México para iniciar una temporada de preparación con el equipo Veratrix, de aquel país. El mes pasado se quedó con el segundo puesto del Nacional de biatlón en México.
En el medio, pasaron días de preparación muy dura, entrenando a la par con triatletas de elite del país azteca. Este mes, debió viajar con premura para llegar y correr Tierra de Gigantes, donde también fue triunfador en los 6 k. De inmediato se trasladó a Formosa para buscar su pasaporte a los próximos Juegos Odesur y allí volvió a quedarse con la medalla dorada y el escalón más alto del podio.
No hubo tiempo de festejar ni disfrutar, pues esta vez su destino lo llevó a Asunción del Paraguay para competir este fin de semana pasado y ganar la Copa regional de desarrollo mundial. Ahora, su agenda marca la ciudad de Santa Marta, en Colombia, prueba que da puntaje para el campeonato mundial y donde Thomas estará corriendo el 11 de septiembre, esta vez, como integrante de la selección argentina, que se prepara para los Juegos Suramericanos que se disputarán en la primera quincena de octubre en la capital paraguaya.
Thomas contó lo vivido este domingo: “Estoy en Asunción desde el lunes pasado, en un campus, compartiendo con gente de Uruguay, Perú, Bolivia, Paraguay. Hemos hecho entrenamientos todos juntos. La competencia fue en un lugar muy bonito (barrio privado). Era todo descampado y hubo muchísimo viento, que soplaba a 45 km por hora, con una temperatura de 18 grados. La largada se demoró un poco por las condiciones climáticas. A la hora de correr, el agua se sintió bien, no estaba fría y pude salir ubicado en la primera posición; luego vino una transición un poco larga. Allí nos fuimos con otro chico argentino con quien pudimos dar una vuelta juntos para hacer alguna diferencia; luego llegó un uruguayo y ahí estaba todo peleado. A la hora de correr pude ir marcando el ritmo hasta que decidí escaparme y pude marcar un 15 largo (no sé exactamente cuánto), saqué diferencia y pude quedarme con la prueba. Estoy contento con esto y ahora vamos a buscar lo que se viene, que es en Santa Marta, Colombia, el 11 de septiembre. Luego vendrán los Odesur, a principios de octubre y a fines de ese mes, los Panamericanos en Montevideo, Uruguay. Luego de esa carrera iré a Viña del Mar, Chile”.