El 9, 10 y 11 de abril se realizará el 101º Campeonato Nacional de Mayores de atletismo en Concepción del Uruguay, Entre Ríos.
Este torneo contará con la presencia de alrededor de 300 de los mejores deportistas de alto rendimiento de la Argentina y algunos tendrán la chance de sumar puntos para llegar a los Juegos Olímpicos en Tokio.
Y entre esos deportistas de élite hay una sanjuanina que consiguió su boleto luego de clasificarse a nivel local enfrentando una complicada dificultad física: un desgarro en la parte posterior de una de sus piernas.
Se trata de Micaela Puebla (25, The Faster Team), quien ganó la oportunidad de representar a la provincia en los 100 y 200 metros planos.
La corredora habló con este diario y dio detalles sobre la competencia que se viene y de la expectativa que tiene junto a otros cinco deportistas locales que conforman la delegación sanjuanina que viajó a Entre Ríos.
El Nacional de Mayores es una competición preparatoria para el Campeonato Sudamericano de Mayores que se hará entre el 14 y 16 de mayo en el Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CeNARD), Buenos Aires.
Puebla lo sabe bien y hasta el miércoles en la noche estuvo entrenando para dicha competencia de la mano de su preparador físico, Armando Morandi. Junto a ese entrenador y Martín Chávez ayudándola a mejorar su desempeño en la pista, conforman un equipo que viene trabajando desde hace 3 años.
Con el primero desarrolla todo lo que tiene que ver con la musculación y la fuerza explosiva. Con el segundo, los lineamientos de cada carrera y la técnica, que, según la joven, es igual de importante que la preparación física.
“El atletismo es muy sacrificado y muchos lo subestiman. Creen que solamente es correr. Hay que tener mucha técnica, mucha disciplina y sobre todo mucha cabeza porque por más que estén los entrenadores o la familia, en ese momento, uno está solo. Como uno gana y disfruta el triunfo, también está uno solo cuando se pierde”, explicó Puebla.
Y siguió detallando los sacrificios que debe hacer para luchar por lo que ama: “Tengo que cuidar que como, que no como; no puedo salir hasta tarde, tampoco puedo acostarme tarde, no puedo salir a bailar. Es un sacrificio no solamente en lo social, sino también en lo afectivo“.
En 2012, la atleta incursionó en esa disciplina. Tanto le gustó que dejó de lado su otro deporte, el hockey sobre césped.
“Empecé a los 16 años por un capricho de mi papá. Vio que era rápida en el hockey y me pidió que probara. Así que le hice caso. Al mes de empezar en esto gané el Cuyano de Atletismo y me gustó tanto que decidí dedicarme de lleno a esto”, comentó la deportista.
“EL ATLETISMO NO LO CAMBIO POR NADA. POR MÁS QUE GANE O PIERDA, SE SIENTE DE UNA MANERA MUY ESPECIAL“
No obstante, su pasión se vio afectada dos años después cuando un accidente automovilístico le dejó una pierna fracturada y atravesada por un hierro y una muñeca quebrada, además de otras lesiones.
La recuperación duró bastante, pero pudo volver. Luego llegó la pandemia en 2020 y con ella la precariedad de entrenar en su casa como podía.
A pesar del coronavirus y las restricciones, siguió entrenando y eso le permitió no perder su estado físico. Y cuando regresaron las competencias tuvo resultados positivos.
El último, hace días, cuando compitió desgarrada y aún así logró salir tercera en los 100 y 200 metros. Ese puesto le valió un lugar en esa competencia deportiva de élite que empieza mañana.
Fuente: Telesol Diario
