Federico Pereyra gritó campeón en Libia y acumuló puntos para Tokio

El voleibolista sanjuanino se consagró en uno de los clubes más poderosos de Libia, el Al Ahly-Trípoli.

La temporada 2020-2021 inició muy bien para ellos, pero cuando culminó la primera fase, se dieron cuenta de que debían reforzarse. Buscaban un opuesto de selección y el sanjuanino apareció en el camino del conjunto libio para dar en la tecla.

El internacional con la Albiceleste llegó en enero último. Abandonó el Al-Wakra de Catar y emigró a tierras libias. Fue clave para que el equipo siguiera ganando hasta alcanzar el Finals Sixs y coronarse como campeón (se concretó previo al último fin de semana).

¿Cuáles son tus sensaciones con este título luego de un año tan atípico?

-Las sensaciones son muy lindas. Después de tantos años de haber jugado afuera, en Bélgica no se me había dado, perdimos finales y algunas temporadas en Arabia Saudita y Dubai. Este año gracias a Dios se dio. Llegué a un grupo muy bueno, me sentí muy cómodo y estoy muy contento de haber ganado este campeonato. Hacía 7 años que no salían campeones y pude ayudar a darle una alegría al club.

-¿Cómo fue tu 2020, cómo pasaste la peor parte de la pandemia?

-No puedo quejarme de mi año. Muchos se quedaron sin trabajo o tuvo problemas de salud. Tengo que agradecer porque estamos sanos y puedo seguir haciendo lo que me gusta. La pasé en casa, fueron muchas horas cuidándome a mí y a mi familia, pero bueno, de a poco vamos pasando este problema. Esperemos que este año sea mucho mejor.

-Qué reflexión hacés sobre tu temporada 2020. La iniciaste en Catar y la terminás en Libia

-De mi comienzo de Liga en Catar me quedo muy conforme. Yo como profesional me quedo tranquilo porque hice todo lo que estaba a mi alcance. Lamentablemente el club no cumplió con llevar a mi familia, que estaba en el contrato, y por eso decidí rescindir antes de Navidad y regresar a Argentina. De ahí me fui contento porque culminé la primera fase como máximo anotador y mejor sacador. Pero me queda el sabor amargo de no haberme quedado a terminar el torneo. Personalmente, entre el deporte y la familia, priorizo lo segundo y por eso opté por tal decisión.

-Luego de este título, ¿qué resta por hacer en la temporada libia?

-Nos queda un solo partido. Será el 21 de marzo y es por la Copa. Ahí terminaría mi temporada. Regresaré a Argentina para volver a ver a la familia y para estar a disposición de la selección nacional si hay algún llamado.

-Finalmente y haciendo referencia a lo anterior, ¿qué expectativas tienes con la selección para este año, qué imaginas?

-Siempre las expectativas con la selección son las mejores. Quiero estar presente y aportarle cosas buenas al equipo. Una vez que termine mis compromisos acá, veré si me tienen en cuenta y si sucede estaré encantado de estar ahí, vestir los colores argentinos que siempre son un orgullo. Estoy con muchas ganas y a disposición.

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