La edición 41 del Dakar, la carrera más difícil del mundo, se puso en marcha y tiene como único escenario la geografía de Perú, con un 70% de arena, lo que da una característica muy especial y a su vez similar al original Dakar que se corría en África. La primera etapa fue corta –como es habitual- con sólo 84 km de velocidad y –de algún modo- sirvió para que los pilotos vayan entrando en clima de competencia. El tramo unió la capital, Lima y Pisco e incluyó 247 km de enlace. EL único representante de la provincia, Alberto Ontiveros finalizó en la posición número 53 y dijo: “Feliz de terminar la primera etapa. Rompimos el hielo, no sacamos los nervios; hay que ajustar la moto a la arena, el manejo, conocer más mi máquina, pero eso se irá dando de a poco. Apenas pude dar una vuelta de media hora antes de comenzar y hoy en carrera, me di cuenta que no la conozco, que nos falta feeling, que la suspensión no está a mi gusto, pero ya nos ponemos a trabajar con el equipo para hacer los ajustes necesarios. Creo que va a ser muy dura la prueba; cuando se multiplique por tres o cuatro veces lo recorrido hoy, nos daremos cuenta lo exigente que es y a esto hay que agregarle que hace mucho calor, por lo que la parte física será fundamental”.
En cuánto a la segunda etapa, desde Pisco hasta San Juan de Marcona el Puchi registró un tiempo total de 4 horas, 41 minutos y 47 segundos y se encuentra en el puesto número 56. En la clasificación general Ontiveros se encuentra en la posición 57 por la sumatoria de las etapas que ya pasaron.