Muchas más incógnitas que certezas dejó la actuación de Jaguares XV en el inicio de la Superliga Americana. La deslucida victoria por 33-22 ante el débil equipo colombiano de Cafeteros Pro no reflejó ninguno de los propósitos con los que llegaron los argentinos al estreno de la competencia en Chile.
La indisciplina, la pésima gestión en los rucks y el desorden generalizado son los aspectos salientes de Jaguares XV, que sólo durante el final del primer tiempo y los primeros minutos del segundo logró imponer su juego. Apoyó cinco tries que le alcanzaron para sumar el punto bonus, pero también recibió cuatro, lo que gráfica la mala gestión en defensa y falta de actitud en los minutos finales.
Esta versión de Jaguares XV es la de un equipo joven e inexperimentado, con apenas un tercio de los que fueron partícipes de la arrasadora campaña de 2021, que se llevó el título de manera holgada. Hecha esta salvedad, se esperaba más del representativo argentino, que por jerarquía y calidad individual está obligado a marcar el ritmo del certamen. El equipo colombiano, con mayoría de jugadores argentinos que están por debajo de la consideración de los seleccionadores y algunos refuerzos nacionales, es a priori el más débil de la competencia.
Los 17 penales (según la estadística oficial) que cometió Jaguares XV y las dos tarjetas amarillas que sufrió hablan por sí solos. El equipo de Carlos Ignacio Fernández Lobbe no estuvo enfocado. Además, perdió muchas pelotas propias en los rucks, estuvo impreciso en el line-out y se excedió en errores de manejo. Nunca se impuso en el contacto y mostró desacoples en defensa. Así es imposible desplegar el juego dinámico y de alta intensidad que se propone.
Lo positivo pasa por los nombres propios: el regreso de Mayco Vivas luego de dos años y tres meses sin jugar (su última aparición había sido durante el Tri-Nations 2020), la buena conducción de Santiago Mare y algunos arrestos de Agustín Segura. No mucho más.
“No me gustó el partido”, aceptó el entrenador Fernández Lobbe en declaraciones a ESPN. “Destaco que, con todas las individualidades nuevas y la semana complicada que tuvimos, habiendo llegado el miércoles, con 10 o 12 jugadores con diarrea y fiebre, algunos de los cuales no pudieron viajar, los chicos sacaron el partido adelante. Los felicito de la manera lo hicieron. El tema principal es bajar la indisciplina. Vamos a poner foco en eso.
Le costó más de la cuenta entrar en ritmo al equipo argentino. Durante la primera media hora, y más allá del try tempranero de Andrea Panzarini por la vía del line-out y el maul, predominó el desconcierto. Incluso sufrió una amonestación (D’Agostino, por knock-on intencional) y Cafeteros consiguió su primer try.
Recién a partir de la segunda conquista del hooker del SIC (por idéntica vía que el primero) Jaguares XV logró asir el partido. A partir de una enorme superioridad en el scrum, donde Vivas mostró su clase internacional, y de que comenzó a imponerse en el contacto con el juego corto de los forwards encontró algo de fluidez. Al final del primer tiempo ya había logrado el bonus ofensivo merced a las conquistas de Gerónimo Prisciantelli y Mare.
El segundo tiempo comenzó con otro try de Mare luego del mejor avance en continuado de Jaguares XV. El triunfo estaba asegurado y parecía una buena forma de empezar a enfocarse en las cuestiones más básicas para, a partir de allí, acercarse a lo que buscan los entrenadores. Sin embargo, ocurrió lo contrario. El equipo profundizó la inconsistencia, repitió errores y jamás pudo imponer el ritmo de juego.
Al contrario, fue el equipo colombiano el que terminó jugando mejor y apoyó tres tries más para quedarse con un importante punto bonus ofensivo por haber cruzado cuatro veces el in-goal.
“El año pasado fuimos de más a menos, terminamos ganando pero no jugando un muy buen rugby. Hoy arrancamos mal, sacamos el partido adelante, así que está todo por construirse”, resumió Fernández Lobbe.
La segunda presentación de Jaguares XV será el próximo sábado, ante Olimpia Lions de Paraguay, también en Valparaíso. Del estreno, poco para rescatar y mucho para corregir.