«Miedo, es poco lo que sentí. Nunca me había pasado una cosa así. Viendo los videos, pienso que podría haber pasado cualquier cosa», aseguró Pablo Núñez, el árbitro sanjuanino que estuvo en el campo de juego de Huracán Las Heras cuando se produjo la balacera que terminó con un herido y nueve detenidos, y parece responder a una interna entre la barrabrava del club mendocino. El colegiado, en diálogo con Tiempo de San Juan, relató cómo vivió aquel dramático momento y, ya en San Juan, manifestó que situaciones como la de este domingo «me hacen valorar aún más a la familia y amigos, uno no sabe qué puede llegar a pasar».
Núñez fue el encargado de impartir justicia en el duelo que protagonizó el «Globo» mendocino con Ferro de General Pico, en el marco de la última fecha de la fase clasificatoria de la zona 1 del Federal A, torneo que también disputaron Sportivo Peñarol y Desamparados. No estaba solo en el partido, lo acompañaba como asistente el sanjuanino Gabriel González.
«Yo detengo el juego porque empiezo a notar una situación rara, de gente del club caminando por la cancha. Entonces paro el partido. De repente siento unos golpes, y después, los estruendos (disparos). Había un jugador al lado mío, que se agacha, y yo hago lo mismo. De la adrenalina, yo no sabía qué pasaba. Empecé a correr, casi que me olvidé de todo porque corrí», explicó de antemano.
El árbitro sanjuanino contó que corrió a buscar refugio, al igual que jugadores y cuerpo técnico de ambos equipos. «Terminé detrás de una pared que da al banco de suplentes. Fue todo muy rápido, fue algo de dos o tres minutos. Fue un susto que por suerte no pasó a mayores. Fue un hecho aislado que no tuvo nada que ver con el partido, que se desarrolló de manera normal».
A los pocos minutos supo que el director técnico de Ferro Carril Oeste de General Pico, Mauricio Romero, había recibido un impacto de bala en su hombro izquierdo. «No me percaté en ese momento. En el video sale cómo nos damos vuelta y empezamos a correr. Nunca pensamos que una cosa podía pasar adentro de la cancha, que podía estar a nuestro alcance. Ahora la podemos contar.
Núñez comentó que post incidente pasaron varios minutos en su vestuario y, después, con total normalidad, pudieron salir del estadio para regresar a San Juan. «Estamos bien. Ahora estamos de vuelta, disfrutando de la familia y amigos, tranquilos. Esas cosas así te hacen valorar muchas cosas», apuntó.
Ahora Huracán Las Heras está en manos del informe que presentará el árbitro sanjuanino. Al respecto, afirmó que «yo informé todo lo que pasó en el partido, no tomo decisiones. Eso pasa por el Tribunal de Penas».
Fuente: Tiempo de San Juan