Con el viento como protagonista, el Piuquén volvió a sacar un partido complejo porque el Tricolor nunca se rindió. Con la defensa como bandera, el club de Santa Lucía dio otro paso importante en la división más difícil del Regional. Además, entendió cómo lastimar a los locales y contó con Juan Ignacio Búbica y Franco Uñates. El centro siempre ganó metros cuando tuvo tiempo y espacio. Además, junto a Wiernes fueron un candado en el centro de la cancha. El medio scrum le dio ritmo a los delanteros y asistió a los backs para que estos marquen la diferencia.
El Cacique sintió las ausencias de sus jugadores lesionados. A lo largo del cotejo no pudo plasmar su plan de juego y refugió en la potencia del pack de forwards para que percutan a una línea defensiva rival que siempre se mostró firme.
Intermitente primera etapa donde el viento condicionó las intenciones de cada equipo, pero fue el San Juan quien pudo hilvanar más de un pase para lograr quebrar la defensa Cacique por las puntas y poner las cosas 17-5. Sin embargo, Huazihul supo sobreponerse y a través de sus delanteros comenzó a merodear ingoal ajeno para achicar la brecha en 12-17 e irse al descanso con la expectativa en dar vuelta la historia.
En la segunda etapa, el Piuquén mostró su mejor repertorio. Apoyándose en su defensa, la visita le movió la pelota a los dirigidos por Pablo Tinto y los espacios aparecieron. Además, empezó a dominar en las formaciones fijas. Gracias a esto, logró estirar diferencias. Los locales fueron por la heroica pero se topó con el candado del Club de Santa Lucía. Sin embargo, en la última descontó para condecorar el score por 37-17 a favor del actual puntero de Copa Plata.
Fuente: Cuarto Tiempo.