La Selección Sanjuanina de futsal femenino escribió en Rosario una de las páginas más importantes de su historia. En el Torneo Argentino organizado por el Consejo Federal de AFA, el combinado provincial llegó por primera vez a la gran final y se quedó con un subcampeonato histórico, tras caer 3 a 1 ante Bariloche. Más allá del resultado, la medalla obtenida marcó un antes y un después para la disciplina en la provincia.
Una de las voces que mejor representa ese proceso es la de Virginia Jofré, integrante del plantel y referente de un grupo que supo construir identidad, compromiso y sentido de pertenencia. “Es una alegría y un orgullo muy lindo tener esta medalla. Obviamente siempre se quiere la del primer puesto, pero ha sido un logro histórico para la provincia”, expresó la jugadora, todavía atravesada por la emoción del torneo.
Las claves de un equipo que hizo historia
Al analizar el recorrido hasta la final, Jofré apunta a conceptos claros: juego, unión y objetivo. “Nuestra forma de jugar, la identidad que marcamos desde que empezamos a entrenar y la unión del grupo fueron claves”, explicó. El equipo entendió rápidamente qué pretendía el cuerpo técnico y logró plasmarlo dentro de la cancha.
Desde lo individual, la jugadora también destacó el nivel del plantel. “Cada una tiene buenas condiciones. Cuando el técnico pudo plasmar la identidad del juego, eso se vio reflejado y los partidos se nos fueron dando”, señaló. Ese equilibrio entre talento y orden fue determinante para avanzar ronda tras ronda y meterse en la definición del campeonato.
Un presente que refleja años de lucha
Con más de diez años dentro del futsal, Virginia Jofré puede comparar etapas y dimensionar el momento actual. “El crecimiento es muchísimo. Antes esto ni por cerca pasaba, era todo muy amateur”, recordó. Hoy, el escenario es distinto: mayor visibilidad, torneos nacionales y una selección provincial que compite de igual a igual.
La futbolista considera que este subcampeonato es apenas un paso más en un camino más largo. “Necesitamos que el futsal femenino sea más visible, que se le dé la misma importancia que al masculino. Ojalá esto marque un antes y un después”, remarcó, haciendo foco también en el desarrollo desde inferiores y escuelitas.
Ese crecimiento, sostiene, no es casual. Es el resultado de años de insistencia y de una lucha colectiva. “Habla mucho de todas las jugadoras que querían ser vistas y tener su lugar”, afirmó, sintetizando una causa que trasciende a este torneo en particular.
La emoción de vestir la camiseta sanjuanina
Para Jofré, representar a San Juan tiene un valor especial. “Es algo hermoso, un objetivo personal de cada jugadora”, confesó. Llegar a la final y colgarse una medalla con la camiseta provincial es, para muchas, la materialización de un sueño que parecía lejano.
Esa carga emocional también se refleja en las anécdotas que dejó el viaje. Entre risas, Virginia recordó un episodio previo a una semifinal, cuando un hombre en una plaza les regaló flores con una frase que quedó grabada: “Estas son para el rival, porque ustedes ganan hoy”. Horas después, la selección cumplió el presagio y avanzó a la final. “Es algo de lo que nos vamos a reír siempre”, contó.
Mucho más que un resultado
El subcampeonato no solo se mide en una medalla. Representa respeto ganado, identidad consolidada y un mensaje claro hacia el futuro del futsal femenino sanjuanino. Jofré no se olvida de agradecer: al equipo, a la liga y a las familias que acompañaron durante todo el proceso.
San Juan perdió una final, pero ganó algo más profundo. Y como bien lo resume Virginia, este logro en Rosario no es un techo, sino un punto de partida.
El video completo de la entrevista en EN 4D: