El partido entre Desamparados y Colón por el Torneo Regional Amateur, disputado anoche en la cancha del local, terminó en un bochorno generalizado que dejó una imagen lamentable para el fútbol regional. El encuentro, que se jugaba sin goles cerca de la finalización del primer tiempo, fue suspendido tras una serie de incidentes violentos que involucraron a jugadores, hinchas y autoridades de ambos clubes.
La primera chispa del conflicto fue una pelea entre los futbolistas dentro del campo, que rápidamente escaló cuando un hincha de Desamparados invadió el terreno de juego y agredió a jugadores de Colón. El incidente se intensificó cuando el agresor recibió varios golpes por parte de los futbolistas rivales. A medida que la situación se descontrolaba, desde las tribunas comenzaron a caer proyectiles que impactaron a integrantes del equipo visitante, lo que generó un ambiente de caos y temor en todo el estadio.
Un video divulgado por Radio Santa Cecilia documentó los momentos previos a la suspensión del partido, mostrando cómo los hechos fueron de mayor a menor durante más de veinte minutos, hasta que el árbitro decidió suspender el encuentro por la seguridad de los jugadores y la integridad del espectáculo deportivo.
El presidente de Colón, Gerardo Iturrieta, habló sobre el incidente y respondió a las acusaciones del presidente de Desamparados, Augusto “Tato” Pérez Garro, quien sugirió que la violencia había sido planeada. «Cada uno puede decir lo que quiera, pero lo que pasó fue un partido friccionado, con algunas oportunidades para ambos equipos. No es necesario inventar historias», afirmó Iturrieta en una entrevista con Radio Sarmiento. Sin embargo, agregó que el problema comenzó cuando un simpatizante de Desamparados ingresó al campo y agredió a un jugador de Colón, lo que desató el desmadre.
Iturrieta también criticó la falta de solidaridad por parte de la dirigencia de Desamparados, acusando a los responsables del club local de restar importancia a los hechos y no ofrecer apoyo a los afectados. «Nunca sentimos apoyo, solo nos dijeron que era una ‘obra de teatro’ montada por nosotros para suspender el partido», dijo el presidente de Colón, quien además reveló que varios de sus jugadores terminaron heridos debido a los proyectiles arrojados desde la tribuna.
El clima tenso se extendió fuera del campo, donde Iturrieta instó a la autocrítica de los dirigentes de ambos clubes, subrayando que la violencia no tiene cabida en el fútbol y que es necesario trabajar para evitar que este tipo de situaciones se repitan.
El fútbol, en lugar de ser una fiesta deportiva, vivió anoche en Puyuta un episodio de violencia que empañó lo que debía ser una jornada de competencia y camaradería.