Los dirigentes del Club Sportivo Peñarol están hartos. Otra vez el Bohemio fue el blanco de los delincuentes que intentaron robar en el sector de camarines, pero afortunadamente no tuvieron éxito, no se llevaron nada y solo alcanzaron a romper algunas puertas y candados.
La alegría de la nueva conducción encabezada por el presidente Carlos Leotta y un numeroso grupo de mujeres y hombres elegidos por unanimidad este lunes por la noche, se diluyó rápidamente este martes por la mañana cuando se enteraron que desconocidos habían ingresado al Estadio Ramón Pablo Rojas.
«Estábamos muy contentos por la asamblea de anoche, pero esta mañana a las 9:30 me llama el encargado de utilería para avisarme que se habían metido otra vez al club. Pienso que hay una cosa rara atrás de esto, pero me reservaré la opinión. Es muy raro que luego de que el presidente fue elegido de manera unánime pasen estas cosas», le contó Gustavo Brizuela, vicepresidente primero de la institución chimbera, a Telesol Diario.
En esta ocasión, los ladrones no se llevaron nada, pero los dirigentes y socios están cansados de que el club por el que tanto esfuerzo hacen, otra vez sea víctima de la inseguridad que impera en la zona.
«Tenemos un casero, pero está a unos 50 o 60 metros de los vestuarios y es imposible que escuche algo. Tubvimos suerte, pero el vandalismo no deja de existir», comentó Brizuela.
No es la primera vez que ingresan a Peñarol a robar o a intentar llevarse algo, en otras oportunidades sustrajeron indumentaria y otros elementos deportivos. Además, en la sede de calle Chile también los delincuentes hicieron de las suyas. «Se han llevado hasta los reflectores», expresó Brizuela.
El dirigente aseguró que en el sector donde ingresaron los delincuentes ya no guardan nada justamente porque está muy desprotegida, entonces solo hicieron daño y ahora habrá que reparar nuevamente las puertas y candados.
Fuente: Telesol
