La Violencia en el fútbol no para y no reconoce categorías. En el fútbol de la Liga Sanjuanina este domingo se jugaba el partido entre Juventud Unida y Recabarren por la zona campeonato de la B local, pero el partido fue suspendido en el minuto 48 del segundo tiempo.
El juego lo ganaba el local Juventud Unida 1 a 0 con el tanto convertido por Jorge Sánchez. Pero en el tercer minuto del descuento del segundo tiempo el árbitro Cristian Nievas cobró un penal para Recabarren.
Cuando estaba siendo atendido el jugador zondino que había recibido la falta que derivó en el penal y cuyo nombre es Joaquin Casivar,recibió una agresión con un puntapié en la cabeza de parte del arquero Eduardo Araya de Juventud Unida, acción que es observada por el juez del partido y por los que estaban alrededor.
Segundos después el jugador queda inconsciente y comienza a convulsionar, por lo que se pide la ambulancia y luego de 25 minutos de espera, es trasladado en la misma al hospital Rawson para una mejor atención.
Cuando estaba en la ambulancia recupera el conocimiento luego de las atenciones realizadas por los paramédicos ya que en el campo de juego una persona se acercó para tratar de auxiliarlo en primera instancia.
Luego de las placas realizadas se determinó que el diagnóstico era un «Trauma encefalocraneano con pérdida de conocimiento». El jugador permaneció internado para observación y su evolución fue derivado para atención con otros especialistas entre ellos un neurólogo.
Consultado al respecto de lo ocurrido al árbitro del partido, Cristian Nievas ratificó lo sucedido y es lo que informó al tribunal de Penas a excepción de los resultados de los estudios realizados al jugador que no le constaba.
La violencia a veces se genera desde el mismo campo de juego y si desde adentro no se pueden controlar, es muy complicado poder erradicarlo. El arquero de Juventud Unida fue expulsado y se espera por la sanción para él cuando se reuna mañana el Tribunal de Penas de la Liga Sanjuanina.
Fuente: Diario Zonda
