El lateral derecho José Luis Gómez fue anunciado como refuerzo de San Martín para la temporada 2024 de la Primera Nacional. Pero, a diferencia de las demás incorporaciones, el ex-Lanús llegará tras haber quedado libre de Racing y haberse desempeñado en la Reserva ya que no juega un partido oficial en Primera desde abril de 2021 en una derrota del Granate por 1-0 ante Sarmiento Junín.
Cuando Jorge Almirón era el técnico de Lanús en 2017, año en el que el conjunto argentino perdió a la final de la Copa Libertadores ante Gremio, el lateral derecho José Luis Gómez logró deslumbrar a varios con sus subidas por la banda y su aporte ofensivo -hizo un gol y dio cinco asistencias en 85 partidos-. Si bien en el Granate tuvo su explosión futbolística con apenas 24 años, esas virtudes ya las había demostrado en sus inicios en Racing y su préstamo en San Martín de San Juan, club al que retornará tras ocho años, pero tiempo más tarde las lesiones y una enfermedad pausaron su carrera.
Desde que estaba en las inferiores de la Academia prometía ser un gran jugador a tal punto que integró varias selecciones juveniles. Sus destacadas actuaciones en el Granate hicieron que el técnico de la Selección Argentina mayor, Jorge Sampaoli, lo convocara.
Por eso es que el 9 de junio de 2017 jugó un amistoso ante Brasil en el que la Albiceleste se impuso por 1-0 con un tanto de Gabriel Mercado y allí compartió cancha con Lionel Messi. Sin embargo, tras ese partido sufrió una rotura en los meniscos de su rodilla izquierda antes del encuentro con Singapur y desde entonces su carrera fue en declive.
“Jugaba con mi rodilla destrozada. Quería estar, pero no tenía fuerza muscular en los cuádriceps antes de la lesión. Lloraba con los dolores. Cuando me iba a dormir me quería dar vuelta y la rodilla me sonaba”, afirmó en declaraciones a TNT Sports en 2020.
Luego de nunca poder volver a tener continuidad, a mediados de 2021 quedó libre de Lanús y recaló en Huracán con el objetivo de volver a ser. Sin embargo, antes de llegar a debutar sufrió un cuadro de anemia que no le permitía entrenarse como correspondía y optó por rescindir el vínculo con el Globo para iniciar un tratamiento y pensar exclusivamente en la recuperación.
Después de superar esa afección, Racing le permitió volver a vivir del fútbol y firmó un contrato por un año, que a principios de 2023 fue renovado hasta diciembre. Más allá de que al inicio jugó varios minutos en la Reserva, luego comenzó a perder lugar y nunca fue considerado en el plantel profesional.
En ese período tuvo que rebuscársela y fue así que decidió trabajar como conductor de Uber. «Nosotros siempre fuimos una familia humilde. El Negrito nos ayuda. Después de los entrenamientos, sale a trabajar con el auto a la tarde. A veces, más a la noche», confesó su padre en diálogo con Olé y deseó: «Ojalá le aparezca algo, así sigue haciendo lo que más sabe y es feliz adentro de una cancha».
Finalmente, esa oportunidad le llegó porque en sus redes sociales el elenco de Concepción lo confirmó como el nuevo refuerzo del club donde registró 29 partidos y tres goles en su primer paso que tuvo lugar en 2015, cuando San Martín se encontraba en Primera.