Como todo chico, comenzó a correr detrás de una pelota cuando era muy pequeño. No tardó mucho tiempo en descubrir que el fútbol era lo suyo y que jugar era lo que quería hacer por el resto de sus días. Ahora, con 17 años, Ulises Monla trabaja para afianzarse en las divisiones menores de Sportivo Desamparados y de esta manera poder debutar en la Primera del Puyutano.
«Yo empecé en una escuelita de fútbol y después me subieron a inferiores. Con 15 años debuté en la Cuarta de Juventud Zondina, equipo del que soy hincha», contó el delantero en diálogo con La Excusa Deportiva. Poco después tuvo su bautismo en la categoría máxima, de la mano del ‘Coneja’ Díaz. «Me generó muchos nervios y alegría poder disputar ese partido frente a Carpintería», comentó. Y si bien no recuerda el resultado, el clásico corte de pelo por parte de sus compañeros no lo olvida más.
En 2022 llegó al conjunto Víbora, donde a diario entrena con la mente puesta en mejorar y seguir creciendo a fuerza de goles.
«Hace poco jugamos una final con la Quinta. Perdimos contra Unión 1 a 0, en la cancha auxiliar del Estadio del Bicentenario», sostuvo sabiendo que a esta edad lo más importante es aprender de cada error cometido.
«Tengo un buen carácter dentro y afuera de la cancha, me muevo mucho en ataque y juego tengo buen juego de cabeza. Mis ídolos son Matías González y el Gato Pereyra.
Con mucho futuro y proyección por delante, no sólo sueña con jugar en la Primera del Víbora sino también en el fútbol grande de AFA, como en Boca Juniors.
«Siento que un futuro voy a tener muchas posibilidades. Tengo fe», finalizó.