Fue su abuelo Miguel quien le inculcó el amor por el fútbol, quien lo llevaba a todos lados desde que era un nene. Quien lo vio crecer corriendo detrás de una pelota. Mariano Nievas tiene 30 años y un fanatismo muy especial por el deporte. Es fanático de River y de Messi, tanto que lo lleva tatuado en la piel y bautizó a su hijo Lionel en homenaje al crack argentino.
Sin embargo, en su corazón también hay lugar para Del Carril, club por el que deja la vida cada vez que le toca jugar. «Del Carril es familia, la gente que va a la cancha lo hace tranquila, sabiendo que jamás va a hacer quilombo. En el club son todos trabajadores que viven el día a día, debe ser el único equipo en el que no te va a faltae nada. Son parte de los resultados porque hacen un sacrificio increíble para que los jugadores nos sintamos cómodos. Me saco el sombrero por ellos», contó el ‘Galgo’ en diálogo con La Excusa Deportiva.
Nievas comenzó a jugar en una escuelita de Angaco, bajo las órdenes del profe Kiko Amarfil, después pasó por Chimbas y también estuvo algún tiempo en Alianza. Las divisiones inferiores las realizó en Huracán. Delantero o enganche, según la situación lo requiera, el joven estuvo a prueba en San Martín y si bien quedó, no pudo continuar debido a una dura situación económica que atravesaba su familia.
«Creo que soy un jugador que lucha todas adelante, que intenta jugar, que no se da por vencido y va a todas… Por ahí toca hacer el sacrificio adelante para que se pueda volver a recuperar la pelota . Soy el primer defensor en la hora de la presión. Por ahí no se me viene dando a la hora de marcar goles pero creo que ayudo al equipo», comentó Mariano.
Además de Messi, tiene como ídolo a Enzo Pérez aunque se ve reflejado en Julián Álvarez al momento de encontrar alguien de referente.
«Estamos por entrar al Regional Amateur. Si bien no falta mucho para que comience, estamos a la espera de algunos refuerzos. Y en el campeonato local estamos encontrando un ritmo futbolístico. Empezamos mal pero nos estamos acomodando. Tenemos un plantel joven, de chicos del club. Somos 4 o 5 los más grandes», añadió.
Orgulloso de los colores que viste, Nievas asegura que «el club hoy por hoy está completo. Hay fútbol en inferiores que le está yendo genial, fútbol femenino que también va muy bien. Tenemos gimnasio. Los dirigentes hacen un sacrificio grande para que no nos falten nada».
Nievas sueña con ir al Monumental junto a su mujer y su hijo, ver jugar a Messi y «obviamente seguir cosechando títulos con el club que amo».