A sus 44 años, Fernando Pedrozo lleva casi toda su vida trepado a una bicicleta de mountain bike y este año se dio el gusto de competir en una carrera a la que siempre quiso asistir: el Desafío al Río Pinto.
El biker comenzó en el mundo del deporte de la mano del karate, pero las constantes lesiones en sus piernas lo llevaron a inclinarse por una disciplina de bajo impacto para sus miembros inferiores como lo es el mountain bike.
«Siempre me gustó la bici de montaña y este año pude correr el Desafío al Río Pinto, una carrera en la que siempre quise estar. Fue un logro muy especial porque significó un gran esfuerzo económico», expresó Fernando, mientras contó detalles de la competencia.
En el final, habló de sus próximos objetivos, como volver a competir en las sierras cordobesas, ir al Trasmontaña en Tucumán o buscar alguna carrera internacional, como así también del significado que tiene el mountain bike, un deporte que eligió como su estilo de vida.
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