El pasado sábado, Concepción Patín Club derrotó por 6-3 a Bancaria en una final netamente sanjuanina y se consagró campeón del Argentino Juvenil de hockey sobre patines. En aquel encuentro, una de las figuras del Azul fue su capitán, Marcos Vega, al anotar dos goles.
El jugador de 18 años contó que comenzó a jugar cuando tenía cuatro por un particular motivo: «Mi maestra jardinera me recomendó hacer un deporte para descargar energías porque era muy intenso», expresó el «Colo».
Los años pasaron y, en la actualidad, es dirigido por Mauro Giuliani, símbolo de la primera división del equipo de la Villa Mallea y también hijo de Darío, el último entrenador en ser campeón del mundo con la selección argentina.
Durante el certamen disputado en Casa de Italia, Mendoza, los chicos de Concepción sufrieron un robo y, como si fuera poco, Marcos estuvo internado. Sin embargo, le hizo frente a las adversidades, marcó ocho goles en el certamen y celebró.
«El valor que tiene este título es muy importante porque es el mayor torneo a nivel nacional. El equipo entrenó al 100% desde el comienzo de la pretemporada para poder ganarlo, pero también tuvo mucha confianza y compañerismo», finalizó el «Colo».
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