Seis minutos del segundo tiempo. Maurín ganaba 1 a 0 e igualaba la serie. El ansiado torneo estaba en suspenso, hasta que apareció el gol que todo Sportivo Del Carril deseaba. Tras un centro de Ávila, Ezequiel Pereyra cabeceó, la pelota se le coló al arquero y comenzó la locura total. Era el empate, en tierras visitantes. Abrazos, gritos y a seguir luchando hasta el final del partido.
«Ni sé cómo hice el gol, jaja. Fue un centro del Pato, quedé pasado, hice unos pasos para atrás, salté y con una maniobra media rara vi que se le metió por atrás al arquero. Sentí una alegría enorme cuando vi que entró la pelota», dijo el goleador de la tarde en diálogo con La Excusa Deportiva.
Pereyra tiene 25 años y juega de volante. Llegó hace un mes a Del Carril y pudo gritar campeón por primera vez. «Jugué otras finales pero no se ma había dado, por suerte ahora sí», señaló.
«Estábamos ilusionados con ganar el torneo y por suerte se nos dio. Fue muy importante el gol que hicimos de local y después nos alcanzó con el empate. En el partido de ida se jugó más, nuestra cancha estaba un poco más linda. En el de vuelta ellos buscaron, intentaron jugar. Nosotros cuidamos el arco, buscamos el gol porque la cancha no estaba en condiciones para hacer otro tipo de juego. Fuimos justos ganadores. Estoy feliz y agradecido al club», agregó.
El joven hizo las divisiones inferiores en San Martín, donde jugó hasta Reserva y partidos del torneo local. Después pasó a Unión donde jugó hasta 2019. Luego partió a Buenos Aires, para sumarse a Rivera. También tuvo un paso por Belgrano de Santa Rosa, en La Pampa. «En 2021 volví a Unión y me sumé a Del Carril para el Regional. Lamentablemente no pudimos clasificar, pero por suerte se nos dio el torneo local», dijo.
Ezequiel sueña con convertirse en futbolista profesional y si bien estuvo cerca, no se pudo dar. «Integré equipos profesionales, pero no pude consolidarme. Deseo tener otra vez una oportunidad y seguir creciendo», añadió.
Para finalizar, el futbolista se refirió al plantel del flamante campeón. «Los chicos son increíbles como personas, como jugadores. A varios los conocía, a otros no. Estoy hace un mes. Me sorprendió cómo te integran al grupo. Los jugadores, cuerpo técnico, dirigentes, allegados, todo. Quedé muy feliz con eso. Se merecen esta alegría», concluyó.