Tiene 20 años y comenzó a jugar al básquet por una recomendación médica. Si bien en su mente estaba el fútbol como prioridad, su padre no quiso saber nada con eso y debió inclinarse por la naranja, sin saber que se convertiría en una pasión incontrolable.
«Comencé a jugar a los 16 por una cuestión de salud. Me diagnosticaron epilepsia transitoria y mi médico me dijo que tenía que comenzar un deporte sí o sí para mejorar. Yo siempre quise jugar al fútbol, pero mi papá no estaba de acuerdo porque no le parecía un deporte adecuado para una mujer. Y como el básquet también me parecía interesante, empecé a ir a la Universidad», contó Brisa Torres en diálogo con La Excusa Deportiva.
La joven tuvo un paso por UVT y este año recaló en Del Bono, donde se consagró campeona. Hace unos días, en cancha de Lanteri, las chicas del Bodeguero se quedaron con el Clausura Femenino al derrotar a Sanjuanino Juniors 66 – 45.
«La verdad es que tenemos un muy buen equipo. Desde principio de año venimos entrenando y formándonos, gracias a las incorporaciones de Agustina, Melin y Priscila fuimos consolidándonos como equipo y mejorando aún más. Todo el trabajo que hicimos durante el año se vio reflejado al terminar el torneo. Al ser la primera vez que me consangraba campeona, me generó muchas emociones. Realmente fue un momento único e inolvidable», señaló.
Brisa no duda en señalar que el básquet en su vida «pasó de ser un hobbie a ser una pasión». «Mi objetivo es seguir mejorando día a día y poder ganar otros torneos más», añadió.
Egresada del Colegio Central Universitario, rindió el ingreso a la carrera de Psicología en la Universidad de Congreso, logrando el tercer mejor promedio. «En cuanto a mi vida, quiero recibirme, trabajar de lo que me gusta, y algún día poder recorrer el mundo, en especial el museo de Cristiano Ronaldo, al que admiro muchísimo», dijo.
«También me gustaría conocer a Jordan algún día, sería increíble», finalizó la joven campeona.