San Martín terminó una temporada 2021 para el olvido. En la última fecha de la Primera Nacional, la 34ª, el conjunto dirigido por Luis Facundo Villalba perdió 1 a 0 ante Independiente Rivadavia de Mendoza y cerró un pésimo año.
El encuentro en Concepción fue la expresión y la radiografía de un plantel que, salvo excepciones, jamás encontró la jerarquía suficiente como para pelear por el objetivo principal: el ascenso a Primera división.
Jugadores con un nivel bajísimo, cambios de DT en medio del campeonato y desaciertos dirigenciales en la elección de los refuerzos, tal vez sean algunos de los argumentos que explican por qué este equipo jamás será recordado por los hinchas.
En cuanto al choque de este lunes hay que decir que en los primeros minutos el Verdinegro entró más enchufado, tuvo más la pelota, pero no lastimó en la zona donde se definen los partidos. En cambio, la Lepra fue más inteligente, lo esperó hasta que encontró el momento exacto para golpear.
Así fue que a los 35 minutos del primer tiempo apareció Diego Cardozo, exjugador de San Martín y marcó el que sería el único tanto de la tarde, en aparente fuera de juego que el árbitro Pablo Giménez no vio. Luego de eso, los mendocinos se dedicaron a consolidar el juego y el resultado. Al local no le alcanzaron siquiera los restantes minutos del partido para igualar el tanteador y así se fue el partido sin pena ni gloria.
En el Hilario Sánchez todos esperaron el pitazo final del árbitro para darle término a un año que otra vez dejó con gusto a poco a la hinchada verdinegra. Barajar y dar de nuevo o poner las barbas en remojo, son frases populares que ya no se quieren escuchar más en el Pueblo Viejo.
Fuente: Telesol.