Tenía 15 años y toda la ilusión de debutar en la Primera División de Atenas, el club de sus amores. Iban 20 minutos del segundo tiempo, cuando Oscar Escoda lo llamó, le dio las indicaciones y lo hizo entrar. El rival era Alianza y duró sólo 30 segundos en cancha. Es que él árbitro lo expulsó por una infracción que al día de hoy, Kevin Bronvale jura que no existió.
«Me acuerdo re bien porque fue el día que Messi debutó en la Selección. Nos dirigió Fabián Vera. Toque la pelota una sola vez. Me hicieron una falta y supuestamente yo tiré un tacazo. La verdad es que no fue asi, caí sobre el otro jugador», recuerda en diálogo con La Excusa Deportiva.
Si hay un apellido que es sinónimo de Atenas, ese es Bronvale. Actualmente son cuatro los hermanos que juegan en el club: Kevin, Wilfredo, Rodrigo y Eduardo. Paul y Fabio, también supieron vestir la casaca del conjunto pocitano pero ya se retiraron.
«Mis inicios fueron jugando torneos de noche cuando era chico, íbamos por todos los departamentos para participar de los campeonatos. Después mi viejo agarró las inferiores de Atenas y nos fuimos con él. Se sexta división, pasé a cuarta donde jugué un solo partido y después llegué a Primera», relató.
Actualmente y luego de ese debut fallido, el media punta tiene unos 100 goles y cinco títulos en su haber. ¿El que más disfrutó? El inafartante choque frente a Aberastain en 2019, disputado en el Estadio del Bicentenario. Tras un empate 2-2 en tiempo reglamentario, el Mirasol se impuso por 3-2 en la definición desde los doce pasos.
Kevin tiene 32 años y sabe que el momento del adiós no está lejos. De todas formas, tiene pensado continuar vistiendo la camiseta aurinegra un tiempo más. «Las ganas siempre están, mientras me aguanten las piernas seguiré jugando», contó. Y después, no descarta ser técnico o dirigente. «Me gustaría, pero por ahora pienso en dejar una buena imagen y ser un ejemplo para los más chicos. Después el tiempo dirá».
Y al momento de aconsejar a los más pibes, no se borra. «Hasta cuando juego trato de dar consejos o les digo lo que les puede llegar a pasar en el partido para que no se pongan nerviosos».
Para Kevin Bronvale, su mejor cosecha en el fútbol no pasa por el lado de los títulos ni los goles. «Lo más valioso son las amistades que conseguí», finalizó.