San Martín perdió esta tarde frente a Barracas, pero lo peor sucedió cuando el partido se moría. Es que el arbitraje de Mariano González había calentado el encuentro, los ánimos se habían caldeado y cuando expiraba el segundo tiempo, decidió expulsar a Julio Ramírez y Ezequiel Denis en San Martín y a Bruno Cabrera en el visitante. Aparentemente, cuando los tres iban camino al túnel, el jugador de Barracas le tiró una trompada a Ramírez y se desató un enorme lío.
Los jugadores de ambos equipos corrieron rumbo a la boca del túnel para multiplicar el conflicto y, los menos, para calmar la tempestad. En el medio, hubo empujones, escupitajos, tironeos y voló una que otra trompada. Incluso el DT del Verdinero, ‘Luigi’ Villalba, se metió en el tumulto para separar a sus jugadores que, entre el enojo por la derrota y que un compañero haya sido golpeado, tenían las pulsaciones a mil revoluciones.
También intervino personal policial que intentó que todo no pase a mayores y culmine el partido, al que le faltaba unos minutos.