Germán Lauro, finalista en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 en lanzamiento de bala y actual técnico operativo de selecciones nacionales de la Confederación Argentina de Atletismo (CADA), aseguró que los atletas nacionales «llegan en buenas condiciones físicas y van a intentar hacer sus mejores Juegos en Tokio 2020» y admitió que la preparación «fue una locura por la pandemia».
«Los chicos intentaron hacer la mejor preparación dentro de las posibilidades que brindó la pandemia. Fue bastante complicado, no la tuvieron fácil. Pero dentro de todo, creo que llegan en buenas condiciones físicas y van a intentar hacer sus mejores Juegos», expresó Lauro, quien también fue finalista en los mundiales de Rusia 2013 y China 2015, en diálogo con Télam.
En Tokio 2020 competirán cinco representantes del atletismo nacional: Germán Chiaraviglio (salto con garrocha), Belén Casetta (3000 mts con obstáculos), Joaquín Arbe, Eulalio Muñoz y Marcela Gómez (maratón).
Lauro, quien se retiró en 2020 a los 35 años, después de 22 de actividad, logró el sexto puesto en los Juegos Olímpicos de Londres 2012; séptimo en el Mundial de Moscú, Rusia, en 2013 y noveno en el de Beijing, China, 2015, y en los Indoor de Estambul, Turquía, 2012; Sopot 2014 y Portland 2016.
Además, Lauro, oriundo de Trenque Lauquen, ganó seis veces la medalla de oro en bala en Campeonatos Sudamericanos (Tunja, Colombia, 2006; San Pablo, Brasil 2007: Lima, Perú 2009; Buenos Aires 2011, Cartagena, Colombia, 2013, Lima 2015).
-Télam: ¿Qué significa que vayan cinco atletas a Tokio, una cifra menor que en los últimos Juegos Olímpicos. El atletismo argentino está en retroceso?
-Germán Lauro: Que vayan cinco no quiere decir que el atletismo esté retrocediendo si no al contrario. Está en un proceso de renovación. Hay una generación que se está yendo, en la que yo estaba, que está en proceso de recambio. Muchos se retiraron y están apareciendo nuevos. Como deporte tenemos un desfasaje entre un cambio de generación y otro. Es algo que pasó en otros deportes como en el vóleibol; al básquet también le va a pasar cuando se pierda la ‘Generación dorada’. También, con la muerte de Braian Toledo, una pérdida increíble, perdimos al intermedio entre nuestra generación y la que viene.
T: ¿Clasificaron pocos argentinos porque la World Athletics puso una vara muy alta para acceder a Tokio?
-GL: Sí. Doy como ejemplo la de lanzamiento de bala porque es la que más conozco: pidió 21,10 metros de marca mínima para clasificar y en los Juegos de Londres 2012, en los que quedé sexto, con esa marca hubiese sido cuarto. De todos modos, algunas pruebas del atletismo evolucionaron mucho y mejoraron mucho en marcas, pero la verdad es que fueron marcas muy exigentes.
-T: ¿Cómo fueron las preparaciones de los atletas en pandemia?
-GL: Fue todo una locura. Primero no se sabía si los Juegos se iban a hacer; después se pasaron para el 2021, con dudas sobre su realización. Eso generó mucha incertidumbre en los atletas y fue muy duro. Y después el punto de la logística: no tener lugares para entrenar, no había sitios habilitados, hubo deportistas que tuvieron que cambiarse de lugar. Por ejemplo, Belén Casetta se tuvo que ir a Tafí del Valle porque en Mar de Plata estaba todo cerrado. Este año poder salir del país fue increíble; muy difícil salir, conseguir competencias. Todo muy difícil. También desde lo competitivo porque muchos no tuvieron grandes chances de ir a competir afuera. Fueron dos años bastante bravos en lo competitivo y el plano logístico. Es un Juego olímpico muy complicado.
-T: Serán los primeros Juegos pos Usain Bolt, la estrella jamaiquina que se retiró en 2017. ¿Cómo será el atletismo pos Bolt?
-GL: Tal vez los 100 metros son la prueba más llamativa o vendible que tiene el atletismo. Yo creo que el atletismo continuamente se vive reciclando. En su momento la figura fue Yelena Isinbayeba, en garrocha; después apareció Bolt. Antes estuvo Sergei Bubka. Ahora siguen apareciendo y renovando nuevas figuras. Hace muy pocos días el noruego Karsten Warholm hizo nuevo récord del mundo en 400 vallas; en bala, el estadounidense Ryan Crouse batió el récord que estaba vigente hace más de treinta años. En los últimos meses de la pandemia se quebraron varios récords mundiales.
-T: Luego del Campeonato sudamericano de mayores de Ecuador, de mayo pasado la CADA resaltó el cambio generacional. ¿Qué avizorás en ese sentido para el atletismo nacional?
-G: La CADA está viviendo un recambio generacional. Hay muchísimo potencial. Está viniendo una muy buena generación, que es muy fuerte. Vamos a poder verlos en el Panamericano de Cali sub 23; también están los sub 20 que vienen con una gran proyección. Tenemos potencial para seguir mejorando como deporte.
-T: Sos vicepresidente de la Federación bonaerense de atletismo hace unos meses. ¿Qué ideas tenés para su desarrollo?
-GL: Lo que intentamos es ordenar la federación, que durante muchos años estuvo como olvidada. Nuestra idea es volver a ponerla de pie. Somos la provincia más grande y con más gente y tenemos que mostrar ese potencial. Este año, la pandemia no ayudó mucho, pero intentaremos el año que viene empezar a generar cosas con la provincia. Hay muchos proyectos.
-T: ¿Cuántas pistas de sintético hay en la provincia de Buenos Aires?
-GL: La provincia tiene carencia de pistas de atletismo. No es fácil tener una. Son inversiones muy caras. En la provincia tenemos en Mar del Plata y La Plata. Después hay otras en lo que sería el conurbano pero algunas pertenecen a la federación metropolitana. La idea es tener en el futuro pistas en el interior profundo de la provincia donde hay mucho atletismo. Pero hay muchas distancias. Es una provincia muy grande. Hay que intentar llegar a todos con infraestructura. Es difícil y más con la situación económica que vive el país y la provincia.
-T: ¿Qué pronóstico tenés para los atletas argentinos en Tokio?
-GL: Que hagan los mejores Juegos posibles. Los chicos intentaron hacer la mejor preparación dentro de las posibilidades que brindó la pandemia. Por ejemplo, Eulalio y Arbe estuvieron bastante complicados para poder salir del país por los vuelos. Fue complicado, no la tuvieron fácil. Pero dentro de todo, yo creo que llegan en buenas condiciones físicas y van a intentar hacer sus mejores Juegos.