No hay parate que divida al amor de un hincha por sus colores. La pandemia sólo les impidió poder ir a la cancha, alentar, dejar la garganta en la tribuna. Pero la pasión por la camiseta va mucho más allá. Y los pibes de la Hinchada Bodeguera lo saben. Por eso se pusieron los cortos y salieron a jugar. ¿De qué manera? Decidieron hacer algunas refacciones para mejorar las instalaciones del club.
Fanáticos de Del Bono, empezaron con las tareas hace unos siete meses. «Con todo esto de la pandemia se veía muy parado el club y al no haber futbol ni actividades, se viene todo abajo, estaba cerrado. Por eso decidimos comenzar a vender números para hacer un fondo. Se lo agregamos a otro que ya teníamos de una fiesta de carnaval que hicimos para el cumpleaños del club. La idea es ayudar a algunas disciplinas y después comenzamos con la obra», comentó Yair a La Excusa Deportiva.
Entre los chicos de la hinchada hay albañiles y pintores, así que lo primero que hicieron fue bajar el revoque del frente del club, ubicado sobre calles Balcarce y Centenario. Todo significó mucho esfuerzo, tiempo y dinero por parte de los jóvenes. Cuando la plata empezó a escasear, hicieron un locro para el 25 de Mayo y con lo recaudado pudieron comprar cemento.
«Después pintamos. Ahora estamos terminando con las ventanas, poniendo muchas pilas, queremos empezar con una campaña de socios también, seguir haciendo obras. Entre todos vamos a levantar el club para iniciar el 2021 a pleno«, agregó Yair.
En total unos 20 jóvenes dejaron todo para hacer que el conjunto de La Esquina Colorada siga creciendo.