El vóley argentino tuvo su día de gloria en las categorías de base. La Selección masculina Sub-23, con el sanjuanino Matías Sánchez en el plantel, derrotó a Rusia por 4-2 en Egipto y se consagró campeona del mundo por primera vez en su historia. Con parciales de 15-10, 15-11, 16-14, 14-16, 13-15 y 15, conquistó un título inolvidable.
El inicio albiceleste mostró una gran solidez, con eficacia en ataque y un buen trabajo en la red. Con el 3-0 en el bolsillo, en el cuarto tuvo el título a dos puntos, pero luego los europeos reaccionaron a tiempo para descontar y estirar la definición.
Tras un 13-15 infartante en el quinto, en el sexto recién llegó el desenlace. El sueño se hizo realidad para los pibes albicelestes, que concretaron la primera corona de su historia con un contundente 15-9.
Tras el título, el armador sanjuanino expresó en las redes su felicidad. «¿Qué decir de este equipo no? Sin palabras para describir lo que siento, solamente agradecer a todos ellos por formar parte de este hermoso grupo que hoy hizo historia», escribió Mati Sánchez, que quedará para siempre en la historia grande del vóley argentino.
Fuente: TyC Sports