Michael Phelps puso el broche de oro a su participación en los Juegos Olímpicos de Rio 2016 con una carrera inolvidable para ganar su medalla de oro número 23, al ganar con Estados Unidos el relevo 4×100 de estilos combinados, una prueba en la que Gran bretaña consiguió la plata y Australia el bronce.
Con esta medalla, Phelps suma 28 preseas en Juegos Olímpicas, el deportista más laureado en la historia de los Juegos. Fue además el artífice de la victoria de su equipo, pues tomó su relevo cuando Estados Unidos no marchaba por delante para, con su relevo de mariposa, mostrarse imbatible y colocarse por delante.
Es la última aparición de Phelps en una piscina Olímpica, ya que ha anunciado en varias ocasiones que no competirá después de los Juegos Olímpicos de Río, aunque ya dijo lo mismo tras Londres 2012 y finalmente regresó a las piscinas 18 meses despuñes.
De hecho, los números que rodean a Phelps no hacen precisamente pensar que vaya a retirarse. El nadador, conocido como la «bala de baltimore», cierra su participación en Rio 2016 con cinco oros de los seis a los que optaba, y una plata.
